Vacunas contra Covid-19 deben ser un bien público mundial

Por Redacción

“Las vacunas contra Covid-19 deben ser un bien público mundial que permita contribuir significativamente a la protección equitativa y la promoción del bienestar humano, a través de una comunicación y transparencia en la gestión esencial para promover la confianza e inmunizar a la gente en un momento histórico y delicado como el que vivimos hoy en día”, manifestó Delia Vanessa López Guerrero, profesora investigadora de la Facultad de Nutrición de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
Durante el Primer Foro Académico de Ética en Investigación 2021, organizado por la Facultad de Medicina el pasado 8 de diciembre, Vanessa López impartió la ponencia Aspectos éticos en la distribución y aplicación de las vacunas contra Covid-19, donde señaló que debe ofrecerse una guía a nivel mundial acerca de la asignación de vacunas contra Covid-19 entre países y ofrecer orientación a nivel nacional sobre la priorización de grupos de inoculación, sobre todo en los países donde la oferta es limitada.
La investigadora hizo referencia en los principios en que se destaca proteger y promover el bienestar humano, incluida la salud, la seguridad social y económica, así como los derechos humanos, las libertades y el desarrollo infantil, además de un respeto igualitario en el que se trate a todos los seres humanos como si tuvieran el mismo estatus moral y sus intereses como merecedores de igual consideración.
Especialista en modelos experimentales de rotavirus e influenza, Vanessa López sostuvo que a través de principios como la equidad global se debe garantizar el acceso a las vacunas y los beneficios a nivel mundial entre las personas en todos los países, particularmente en los de bajos y medianos ingresos, en especial para favorecer a los grupos que experimentan mayores cargas por la pandemia de Covid-19.
Vanessa López Guerrero dijo que la Organización Mundial de la Salud (OMS) en los países que participan en el mecanismo Covax, apoyará para que reciban vacunas y sean aplicadas al 20 por ciento de la población con la finalidad de inmunizar a grupos específicos, como los sectores vulnerables, médicos, personas de la tercera edad y a las mujeres, a través de un sistema de establecimiento de prioridades en función del riesgo en cada país.
Por su parte, Pedro Federico Gaytán Calles, presidente del Comité de Ética en Investigación de dicha unidad académica, destacó que este grupo surgió por la necesidad de cumplir con los requerimientos establecidos en la Ley Federal de Salud, respecto a la investigación en seres humanos y animales, “la Facultad de Medicina de la UAEM, fue la primera en lograr este reconocimiento por el parte del Consejo Nacional de Bioética”, afirmó.
Además, agregó que con los programas de licenciatura, especialidades y posgrado, esta unidad académica de la UAEM se ha convertido en formadora de profesionistas de alto nivel con fortaleza en el campo de la investigación, en cumplimiento de estándares nacionales e internacionales de la ética.

Fotos: Cortesía.