Investigadora de la UAEM estudia crecimiento del crimen organizado y la violencia en Morelos
Por Oswal Alonso
La investigadora de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Morna Macleod, estudia la manera en la que el crimen organizado y la violencia han crecido en Morelos, particularmente en el oriente del estado, y para ello, analiza la actuación de tres líderes de carteles que operan en la entidad para entender sus dinámicas y lógicas, con el fin de entender sus semejanzas y diferencias, lo que puede ayudar al entendimiento global de lo que sucede en otras partes del estado y el país.
En un artículo publicado en la revista científica de la UAEM Inventio. La Génesis de la cultura universitaria en Morelos, la investigadora de la Facultad de Estudios Superiores de Cuautla (FESC), plantea que al estudiar lo que pasa en la región oriente del estado, se puede entender a profundidad el actuar del crimen organizado desde una perspectiva regional.
“Se sostiene que el crimen organizado, la impunidad, la corrupción y la colusión de las fuerzas de seguridad y justicia, así como la connivencia de los partidos políticos, fomentan diversas formas de violencia cotidiana que afligen a la población morelense”, cita parte del resumen del artículo académico.
Morna Macleod, dice que las afectaciones por el crimen organizado no son menores, puesto que incluyen la extorsión y el derecho de piso, lo que ha obligado a muchos comerciantes a cerrar sus negocios, ha provocado la pérdida de hijos y hermanos y los ha conducido al desplazamiento forzado, en un ambiente de terror e incertidumbre.
Explica que el análisis publicado se fundamenta en la revisión hemerográfica de 262 notas periodísticas sobre violencia y crimen organizado en Morelos, entre 2019 y agosto de 2021, y también en una revisión de la escasa documentación académica existente sobre el crimen organizado en Morelos, así como una revisión exhaustiva de la bibliografía sobre violencia en México, principalmente, violencia criminal.
Con todo lo anterior, la investigadora asegura que es extremadamente difícil mapear la presencia y las operaciones de los grandes carteles en México, debido a su naturaleza clandestina y escurridiza, su crecimiento o disminución en el tiempo y las pugnas con otros carteles para controlar la plaza, el territorio, y la producción y distribución de droga.
En su opinión, el nivel de fortaleza e influencia territorial dependen en gran medida del control efectivo de las fuerzas de seguridad estatal y de otros carteles rivales, así como de su capacidad para generar bases sociales que puedan servir para encubrirlos, y por otra parte, entre los carteles existe la tendencia a la fragmentación, a raíz de las disputas internas y entre rivales.
Una de sus conclusiones del artículo es que fue posible rastrear algunas características y patrones centrales del crimen organizado en Morelos. “Una de ellas es que el nivel de colusión y compenetración entre el crimen organizado y elementos de las fuerzas de seguridad, así como de las instituciones de justicia. Otra característica de notable importancia es la connivencia de los grupos criminales con partidos políticos, en especial su injerencia en casi la mitad de las 36 alcaldías en Morelos, ya sea directamente con los presidentes municipales, o con síndicos y regidores”, cita.
Este artículo fue publicado en el número 44 de la revista Inventio y puede consultarse en: http://inventio.uaem.mx/index.php/inventio.
Foto: Cortesía.