En la práctica no disminuye la realidad de la violencia que viven las mujeres

Por Gerardo Suárez

La estadística oficial señala que los niveles de violencia que padecen las mujeres, adolescentes y niños en México van en aumento, a pesar de los esfuerzos por la equidad de género, esto no se ha logrado, por lo tanto, la prevención es deficiente, señaló Roselia Rivera Almazán, profesora de tiempo completo de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales (FDyCS) de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM).
La también integrante del cuerpo académico Estudios Jurídicos Constitucionales, con línea en derechos humanos, y derecho y género, consideró que deben desarrollarse e implementarse mecanismos que impacten en la prevención de la violencia, a través del cambio de conductas, como aumentar un mayor enfoque en el autocuidado.
“Desde la función legislativa hay una tendencia a tipificar conductas como el feminicidio, acoso sexual o la Ley Olimpia, sin embargo, estas medidas no operan en planos preventivos. Y hasta que se presenta la conducta es cuando buscan la aplicación de una sanción, que en muchos casos no regresa al estado o condición que se tenía antes de la comisión de la conducta”, subrayó.
La académica agregó que en el plano legislativo, los Códigos Penales contemplan medidas tendientes a hacer desaparecer los efectos del delito y compensar, si fuera posible, el daño sufrido, “se debe abarcar la indemnización del daño material y moral causado, incluyendo atención médica y psicológica, rehabilitación o tratamientos curativos para la recuperación de la salud que requiera la víctima”.
Roselia Rivera detalló que el problema, visto desde lo jurídico, “no se encuentra en la falta de normatividad sino en el sistema, desde los funcionarios ante quienes se denuncian los delitos, los que investigan y los diversos sectores que participan, aunado a que cada vez más aumenta la atención para las mujeres, pero en la práctica, en nada cambia o disminuye la realidad de la violencia que viven las mujeres”.
La catedrática universitaria expuso que la violencia es una problemática que no afecta sólo a las mujeres, ya que si se habla de homicidio, en la consulta de datos del año 2021 el INEGI señala que de 16 mil 972 asesinatos cometidos en México, 14 mil 880 fueron hombres, mil 904 fueron mujeres y en 188 casos, no pudieron determinar el sexo de la persona.
Rivera Almazán precisó que la violencia que sufren hombres y mujeres se trata diferente desde lo jurídico por causas específicas, como el feminicidio que se encuentra tipificado, pero no es así el homicidio de varones, a pesar de que sí hay mujeres que privan de la vida a hombres, en los que se involucran odio, lesiones o mutilaciones infamantes o degradantes contra la víctima.
“Sólo que las cifras en estos casos son menores respecto a los que se presentan en la violencia donde la mujer es la víctima. La atención que desde el sistema jurídico en todos los niveles, al menos en el caso de México, se da a las mujeres para prevenir la violencia es mayor, pero sin resultados y las estadísticas oficiales así lo confirman”, concluyó.

Fotos: Cortesía.