Presentan proyecto de rescate en El Salto de San Antón
Por Oswal Alonso
El investigador de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Gerardo Gama Hernández, presentó en la V Bienal de Arquitectura 2021 de la Universidad de Panamá, el proyecto de rescate y rehabilitación de El Salto de San Antón, en Cuernavaca.
El pasado 18 de noviembre, el investigador afirmó que se trata de un sitio histórico, atractivo para el turismo nacional e internacional, el cual se encuentra abandonado desde hace 20 años, principalmente por la contaminación del agua y su cascada de 40 metros, que se encuentra a sólo cuatro cuadras del centro de Cuernavaca.
La Facultad de Arquitectura y la Escuela de Turismo de la UAEM, informó el académico, colaboran en un proyecto de rescate del sitio turístico que forma parte de los 13 pueblos del señorío de Cuauhnáhuac, antiguo nombre de la ciudad de Cuernavaca, que significa Detrás de la arboleda, lugar que fue considerado místico y sagrado en el siglo XII.
En El Salto de San Antón se busca rescatar, dijo Gama Hernández, una cascada de 40 metros de altura, cuya agua proviene del río Tetela, uno de los más de 260 arroyos y barranquillas que bajan desde el corredor biológico Ajusco-Chichináutzin y que se agrupa en dos grandes ríos: el Tembembe y el Apatlaco.
El gran problema de este sitio, explicó, es el abandono desde hace 20 años por la contaminación del agua que corre por las barrancas y por el desinterés de las autoridades por resolver el problema de las descargas de aguas negras en las barrancas.
Para dimensionar el problema, detalló Gerardo Gama, El Salto recibe aproximadamente 70 por ciento de las aguas residuales y 30 por ciento de los residuos sólidos generados en su micro-cuenca, al grado que el Instituto de Ecología de la UNAM, encontró muestras de entre 1 y 5 millones de unidades de colonias de coliformes fecales, que de acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), los ríos y arroyos de Cuernavaca alcanzan altos niveles de contaminación, por lo que la ciudad está en riesgo ya que la calidad de su clima y ecosistemas urbanos están en franco deterioro.
Cuidado de espacios naturales y educación ambiental
El investigador de la Facultad de Arquitectura de la UAEM, comentó que con la comunidad de El Salto de San Antón se trabaja en el cuidado de los espacios naturales, se fomenta la educación ambiental, la recuperación de la identidad comunitaria, la reactivación de talleres y comercios de alfarería de barro, viveros y alimentación para reactivar la economía y el empleo, además de trabajar en el diseño de una nueva arquitectura de integración para hacer este lugar más turístico y sustentable.
En el aspecto de la restauración de este lugar, Gama Hernández reconoció que primero debe resolverse el problema de la contaminación; por lo menos de la barranca que lleva a la cascada de 40 metros, que es el principal atractivo turístico.
Tanques sépticos
Abundó que en una investigación realizada por científicos de la UAEM en 2018 en Cuernavaca, se estimó que existen más de 300 lugares de descarga de aguas residuales, por lo que se propuso fragmentar el tratamiento de aguas para limpiar determinado volumen a través de tanques sépticos para el saneamiento y conservación del agua.
Los tanques sépticos se colocarían en las barrancas bajo normas federales y propuestas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), con esta propuesta sería posible verter nuevamente el agua para su reutilización en la restauración ambiental.
Gerardo Gama estima que retomar la propuesta de los tanques sépticos para el saneamiento del agua en El Salto de San Antón, se requerirían aproximadamente 18 tanques, lo cual equivaldría a una erogación de entre 5 a 10 millones de pesos.
Una vez resuelto el problema de la contaminación del agua en El Salto de San Antón, un equipo multidisciplinario reactivaría el proyecto arquitectónico de rescate, donde se considera construir un mirador con cristales y elevador, desde donde se podrá apreciar la cascada de frente. “El proyecto integra agua, arquitectura y turismo”, concluyó el académico universitario.
Fotos: Cortesía.