Elabora UNIG decálogo para una comunicación más inclusiva
Por Oswal Alonso
La Unidad de Género, Igualdad y no Discriminación (UNIG) elaboró un decálogo para una comunicación más inclusiva dentro de la UAEM, con el fin de evitar el uso exclusivo del masculino genérico y promover el uso de sustantivos neutros o colectivos.
Daniela Nava Romero, titular de la Coordinación de Igualdad, Cultura de Paz y Derechos Humanos de la UNIG, informó que desde el año 2022 ya se establece en la normatividad universitaria el uso de una comunicación más inclusiva.
Con base en ello, dijo que se elaboró un decálogo que aborda el lenguaje escrito, el lenguaje oral y también otros tipos de lenguaje, como el visual, que debemos utilizar los trabajadores administrativos y docentes de la UAEM.
“Este decálogo va dirigido al personal administrativo y docente, desde el Centro Médico para que sus constancias las emitan de acuerdo a su género, hasta cómo redactamos las notas y oficios”, explicó.
El documento para una comunicación más inclusiva establece que nombrar es existir y se refiere al hecho de garantizar la visibilidad de todas las personas, evitando el uso exclusivo del masculino genérico; reconoce que el lenguaje es un producto social cambiante, ya que las normas que rigen el lenguaje, lo que hoy se considera correcto, puede carecer de perspectiva de género; y recomienda respetar los nombres, pronombres y términos que cada persona elige para identificarse.
En su cuarto punto, el decálogo pide evitar sesgos y jerarquías implícitas al mencionar siempre primero a un género sobre el otro y recomienda alternar el orden de presentación en expresiones como “la doctora y el doctor”.
La quinta recomendación pide utilizar sustantivos neutros y colectivos, optando por términos como personas, ciudadanía y profesorado, para incluir a todas las personas sin marcar género. Además, considera nombrar profesiones y cargos según el género, esto para respetar la identidad de cada persona, lo que implica usar los términos que correspondan, como ingeniera o presidenta, reconociendo y visibilizando su identidad en cualquier contexto. También es importante cuidar la representación visual, lo que se refiere a asegurarse de que las imágenes, videos y material reflejen diversidad y no refuercen estereotipos de género o roles tradicionales.
Nava Romero también dijo que otro punto es evitar el uso de términos peyorativos, generalizaciones y frases sensacionalistas, lo que hace necesario diseñar mensajes que dignifiquen y fomenten el respeto en cada interacción.
El punto 9 considera inspirarse en otros ejemplos para observar cómo otras instituciones emplean estrategias inclusivas para comunicarse y adoptar prácticas que promuevan la igualdad y la diversidad. Y finalmente, el punto 10, dice que debemos hacer del lenguaje una postura, ya que elegir palabras que visibilicen a todas las personas es una postura frente a la igualdad.
“Es una postura que va más allá de si está bien o no, si es correcto o no el uso del lenguaje, porque también hay renuencia respecto al uso tradicional del idioma español, hoy podemos decir chatear, whatsappear y no va en contra de la modificación del idioma”, concluyó.

Foto: Lilia Villegas.

Foto: UNIG.